El joven ingeniero Anton D’Auria ha sido el encargado de cometer el ultimo ¿descuido? que no ha hecho sino aumentar la expectación sobre el nuevo iPhone 5. D’Auria simplemente salió a comer, tomó la foto a su suculento plato de sushi, y la subió al portal de fotos Flickr.

Pero una vez allí, los curiosos más aventajados examinaron las características de la foto, que proporcionan los datos EXIF, y que incluyen la cámara o móvil con la que fue tomada. Flickr la identificó como hecha por un iPhone 4, pero había algo que no cuadraba. El sensor de la cámara era de 8 megapíxels, cuando la cámara del actual modelo de iPhone es de solo 5 MP. La mecha ya estaba encendida, y la pólvora caliente.

Así, se viene a confirmar (salvo sorpresas) que el nuevo iPhone5 incorporará una cámara de 8 MP. De esta forma estaría a la altura del resto de sus competidores directos: como el Samsung Galaxy SII, o los nuevos smartphones de Sony-Ericcson, cuya óptica en cámaras es la líder del mercado.

Esta es ya una nueva característica del iPhone 5 a añadir a las que ya conocemos, como su diseño ultrafino, o su pantalla más grande (4 pulgadas). Y también es la penúltima anécdota a sumar mientras se espera el inminente lanzamiento de este nuevo bombazo de Apple que amenaza con batir récords de venta anticipada.